Norberto Geréz, el transportista de 45 años detenido ayer luego de que estuviese a punto de provocar una catástrofe cuando iba al volante de un camión con acoplado en estado de ebriedad –tenía 1,65 mg de alcohol por litro de sangre– y, tras un incidente, quedó prácticamente colgado de la autopista 25 de Mayo, sobre la calle Perú, en el Bajo porteño, fue indagado e inhabilitado para conducir.

El camionero fue imputado por “haber creado una situación de peligro común inminente para la sociedad”, según lo establecido en el artículo 189 del Código Penal –que sanciona el estrago, uno de los delitos contra la seguridad pública– y por haber conducido con un nivel de alcoholemia superior al permitido. La investigación continúa su curso en la Fiscalía en turno.

La Unidad de Flagrancia Este del Ministerio Público Fiscal (MPF) de la Ciudad le impuso la prohibición de salida del país sin autorización judicial y la inhabilitación provisoria para manejar vehículos por el término de 9 meses, reteniéndole la licencia de conducir. La Fiscalía podrá ampliar el plazo de la prohibición en caso de que no se realice una audiencia de debate.

Según informó el MPF porteño, también se comunicó la resolución al Registro Nacional de Antecedentes del Tránsito (Renat) y a la Secretaría de Transporte del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Asimismo, el imputado tiene que fijar domicilio, comunicar cualquier cambio y deberá comparecer a todas las citaciones que hagan el juzgado y la fiscalía.

Ayer, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), ya le había suspendido de oficio la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LiNTI), a quien citará, oportunamente, “para que sea evaluado con un examen psicofísico de oficio que determine su idoneidad para la conducción profesional de vehículos de cargas o de pasajeros en el país”.