Ricardo Arriazu: el país “de las oportunidades perdidas” y por qué el gran Buenos Aires es el “gran perdedor” con Milei
“Este es el país de las oportunidades perdidas”, dijo hoy el Ricardo Arriazu al describir la evolución histórica de la economía argentina y sus ciclos de expectativas, crisis y recesiones. ...
“Este es el país de las oportunidades perdidas”, dijo hoy el Ricardo Arriazu al describir la evolución histórica de la economía argentina y sus ciclos de expectativas, crisis y recesiones. Pero en ese escenario, afirmó que ahora “se están alineando” las condiciones para una nueva oportunidad de crecimiento, apuntalada en Vaca Muerta y la minería.
“La economía argentina tiene una estructura productiva absolutamente artificial”, afirmó Arriazu, al describir al país como “uno de los más proteccionistas” del mundo. “Nos hemos dedicado a proteger los sectores donde no tenemos ventajas y perjudicar a los que sí tienen ventaja”, agregó el especialista, en referencia al sector industrial y la producción agropecuaria.
En su diagnóstico, eso generó un contexto de desconfianza entre agentes económicos, que hoy impacta negativamente en las oportunidades de inversión necesarias para el desarrollo de rubros como la minería o el crecimiento de Vaca Muerta.
“Hablé por primera vez de Vaca Muerta en 2011, y el miedo no eran los recursos, sino malgastarlos, pero hicimos las cosas tan lentas que nunca se malgastaron los recursos. El problema siempre es la Argentina”, insistió Arriazu, quien conectó ese escenario con el que hoy vive la minería.
“Está como Vaca Muerta en 2013. El tema es que a diferencia de la energía, esto requiere mucho dinero y tiempo, y eso no se logra sin confianza”, planteó Arriazu, y agregó: “El país trae barcos para GNL y no hizo la planta en tierra firme porque si en un tiempo alguien dice ‘Exprópiese’, me llevo el barco. En minería no se puede: el dinero hay que enterrarlo”.
No obstante, destacó que el desarrollo de la producción de hidrocarburos en Vaca Muerta tendrá un impacto positivo en términos macroeconómicos. “Llegamos a tener US$5000 millones en déficit energético, este año vamos a tener US$9000 superávit, para el que viene US$4000 más y el próximo US$7000 más”, detalló.
Al analizar la evolución del programa económico de Milei, con las oportunidades en los sectores mencionados y su propuesta de apertura, advirtió que “el gran Buenos Aires es el gran perdedor” del esquema. “El gran Buenos Aires es la creación del proteccionismo”, dijo Arriazu porque, según su visión, fue consecuencia de la protección “de ese único mercado”.
Hacia adelante, sin embargo, advirtió sobre las tensiones políticas y sociales que podría generar un cambio económico y demográfico alrededor del nuevo esquema productivo, con crecimiento en sectores lejos del AMBA y menores oportunidades en servicios o la industria de los conurbanos. “Todo cambio es muy destructivo, traumático y problemático”, alertó.
Arriazu también analizó el vínculo entre Milei y Trump, y dijo que si bien “se parecen en las formas” y “entre ellos se tienen simpatías”, “son distintos en el resto”. “Milei es aperturista y Trump propone una economía cerrada”, explicó, al describir las posibles consecuencias del acuerdo comercial bilateral.
También se refirió al swap firmado entre el Tesoro estadounidense y el BCRA e insistió en que “no tiene nada que ver con el swap de China”. “Ese es un dibujo contable, que no se puede usar a menos que China lo autorice. Este lo decide el gobierno argentino, lo usa cuando quiere y para lo que quiere. Es como caminar de la mano de JP Morgan”, ilustró, al describir el impacto que podría tener este acuerdo sobre la confianza hacia el país por parte del mercado financiero.
A nivel global, Arriazu alertó también por eventuales riesgos de una “burbuja” en el precio de los activos financieros y por las consecuencias de una eventual “guerra comercial” impulsada por Trump, mediante la aplicación de aranceles. “La gran pregunta es si estamos ante un fenómeno nuevo y un cambio estructural, o si estamos en una burbuja como en 1999. Y creo que hay un poco de cada cosa”, afirmó.
En su análisis, fue crítico de Donald Trump por su uso de aranceles comerciales y la presión sobre la Reserva Federal por las tasas de interés. “¿Se imaginan que Estados Unidos, que tiene déficit fiscal y de cuenta corriente, lo puede financiar con tasas negativas?“, apuntó.