Brasil creció cinco veces más que la Argentina mientras estuvo alineado con Estados Unidos
“Yo voy a estar siempre, en lo que se refiere a política internacional, junto con Estados Unidos y con Israel”, dijo Javier Milei al asumir como presidente de la Argentina. Esta fue una dispos...
“Yo voy a estar siempre, en lo que se refiere a política internacional, junto con Estados Unidos y con Israel”, dijo Javier Milei al asumir como presidente de la Argentina. Esta fue una disposición tan tajante que inclusive llegó a pedirle, al cabo de un tiempo, a la canciller Diana Mondino que renunciara por una disposición, que si bien era tradicional de nuestro país por el tema Malvinas, no le pareció justo al Presidente sostenerla. También el nuevo canciller Gerardo Werthein renunció antes de las muy buenas elecciones legislativas del 26 de octubre.
La Argentina creció mucho, sobre todo en la época en que Gran Bretaña era un líder mundial indiscutido, digamos, hasta la crisis de 1929. Pero después resultó fatigante el crecimiento para la Argentina.
En cambio, Brasil se unió mucho a Estados Unidos y se mantuvo firme junto a ese país todo el tiempo, incluso como aliado en la Segunda Guerra Mundial. ¿Cuánto le rindió a Brasil apoyar siempre al líder mundial? Si se cuenta desde 1928 hasta ahora, le rindió cinco veces más que a la Argentina.
El lema del justicialismo para las elecciones de 1946 fue “Braden o Perón”, o sea, “EE.UU. o Argentina”. Eso le dio al peronismo buenos resultados, pues poniéndose en contra de Estados Unidos hizo una política de repartir la riqueza acumulada, compró muchas empresas privadas, principalmente inglesas, como los ferrocarriles, que pasaron a ser del sector público, aumentaron el gasto público y los impuestos y, a pesar de deuda pública muy alta, también recurrió al Banco Central para emitir dinero para el Tesoro, principalmente con los adelantos transitorios.
El salario real creció mucho en estos años del peronismo, lo que le otorgó una base electoral muy firme, además de los apoyos del justicialismo a gran parte de los trabajadores luchando por los humildes. Pero se destrozó la economía, al menos comparando con Brasil, pues la inversión bruta interna fija de la Argentina estuvo cerca del 20% del PBI, cuando esa relación era de cerca del 40% hacia 1910.
En 1989 la Argentina tuvo como presidente a Carlos Menem, que dio su Ministerio de Economía a Bunge y Born, la empresa más importante del país en aquel momento. Con Menem había “relaciones carnales” con EE.UU. Esos planes se completaron con economistas como Erman, González, Domingo Cavallo y Roque Fernández.
Pero después vino Fernando De La Rúa, que no supo manejar la situación, sobre todo con la devaluación de Brasil del 40% de enero de 1999 y la Argentina devaluando cero para un mercado común. Muy difícil de sostener.
Después vinieron más de 20 años de kirchnerismo, tanto Néstor como Cristina, donde todo se borró, es más, se hizo lo contrario que en la época de Menem, como la estatización de YPF y de Aguas Argentinas; la eliminación de las jubilaciones privada (AFJP) y el traspaso al sector público de todas las jubilaciones; se sacaron reservas del Banco Central, que, a cambio, recibió unos papeles del Tesoro sin intereses, para pagarle al Fondo Monetario Internacional las deudas a tasas bajas que tenía la Argentina, mientras se financiaba al Tesoro con bonos colocados en Venezuela hasta el 15% anual en dólares, donde se dio por cerrado ese tipo de financiamiento
Hace un tiempo que gobierna Lula da Silva en Brasil y antes lo hizo el mismo y Dilma Rousseff. Brasil hoy se inclina por China y comparte mucho con los gobiernos de Chile, Perú, Colombia, México, Venezuela, Cuba y otros latinoamericanos próximos a Brasil en distinto grado opositores de EE.UU.
Conclusión: sin que sea el único factor, Brasil creció cinco veces más que la Argentina mientras estuvo con EE.UU. Esperemos que ahora nos toque crecer a nosotros, que somos aliados de EE.UU. y Brasil no. Si bien no es tan simple, esa es la idea de Milei.